No suele presentar síntomas lo que puede hacer difícil su diagnóstico o incluso, puede hacer que no le demos la importancia debida a su tratamiento.
Lo mejor es prevenir para evitar que este mal silencioso nos ataque pero, si tu ya sufres hipertensión, no lo dejes pasar e intenta mantener un peso correcto y llevar a cabo una correcta alimentación, para ayudar a que tu tensión arterial disminuya o incluso vuelva a sus parámetros normales.
De todos modos, si quieres recomendaciones personalizadas para tu situación no dudes en contactar conmigo, te adaptaré la pauta a tus necesidades y te asesoraré para que consigas una alimentación equilibrada.